martes, 22 de marzo de 2011

Quiero dejarle pero no puedo

Algunas personas sufren tremendamente intentando terminar una relación pero cada vez que encuentran el valor de hacerlo , algo parece distraerle de su propósito. Lo grave es que al no dejar esa relación desgastada sólo convierten sus días en un tormento que no tiene fin. El Blog del Amor repasa algunas de sus consecuencias.
Son innumerables las parejas que prefieren darle continuidad a una relación socavada por el resentimiento, el maltrato, la incomprensión, el dominio unilateral, la falta de respeto y el desorden por parte de algunos de sus miembros. La razón por la que no terminan la relación es siempre la misma… Creo que puede cambiar, tal vez con un poco más de tiempo… Pero cuánto tiempo permitirás que te roben tus derechos y te pisoteen tu dignidad?.
No se trata de que en función de los niños una madre deba soportar golpes y humillaciones verbales de su pareja, tampoco por el hecho de que no haya un medio económico para solventarse, tampoco de que exista el temor por represalias. La verdadera razón por la que muchos no logran terminar una relación tormentosa es por falta de amor propio, falta de autoestima y sentido común.
Aquellos que convierten su sufrimiento es un estilo de vida al que se van acostumbrando, suelen endurecer sus sentimientos y volverse mecánicos y amargados. Empiezan a obedecer por miedo a todo lo que les sale al paso. Sus sensores aprender a reconocer el peligro y tratan de equiparse un poco antes de que salte su agresor. Este tipo de comportamiento inhibe el resto de las emociones, y los sentimientos se van perdiendo entre el dolor y la angustia.
Debemos reparar lo antes posible una relación, sanarla en su totalidad y no permitir que se convierta en un infierno del que no sabremos como escapar luego. La mejor manera de vivir es fuera de conflictos innecesarios y procurando hacer de cada día un espacio donde la paz y la comunicación sean propagadas en el hogar. Recordemos que ningún niño crece feliz viendo el dolor de su madre, la traición de su padre o la violencia doméstica.
Empecemos por cada día querernos un poco más, intentemos comunicar amor en todo lo que hacemos y sobre todo fortalezcamos nuestro interior con una sana relación con el creador y Padre Celestial.

fuente: tequiero.tk

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